Una utopía distante: The heady feeling of freedom

-Sí, ese podría ser otro mundo. Es posible que exista dentro de mí. Yo no soy sólo el que soy ahora, hay otras muchas posibilidades de ser yo mismo.

-Si te lo tomas así, el mundo real no es tan malo como pensabas.

-Me parece que el mundo real no está tan mal, pero no me gusto a mí mismo.

-Es tu corazón el que se lo toma mal y el que siente angustia ante la realidad.

-Es tu corazón el que decide cuál es la realidad auténtica.

-Si cambias el punto de vista con el que ves la realidad y las situaciones, cambiará radicalmente lo que siente tu corazón.

-En el mundo hay tantas verdades como personas.

-Pero para ti sólo existe una verdad. Es una verdad limitada y deformada por todos los engaños que utilizas para protegerte. Pero es tu verdad.

-El mundo de cada individuo es muy limitado y muy pequeño.

-Las personas sólo tienen una regla muy pequeña para medir las cosas.

-Las personas sólo quieren ver las cosas desde el punto de vista de los demás.

-Te sientes bien si hace buen tiempo.

-Los días de lluvia son deprimentes.

-Te lo enseñan así y acabas pensando así.

-En los días de lluvia también pasan cosas divertidas.

-La verdad que hay en el interior de las personas es muy fragil y cambia fácilmente con las influencias externas.

-La verdad es muy profunda en los seres humanos, por eso la gente quiere conocer una verdad más profunda.

-Sencillamente, tú no estás acostumbrado a gustar a la gente.

-Por eso no tienes que preocuparte por la cara que ponga la gente ante las cosas que tú haces.

-Pero... ¿Parece que todo el mundo me odia, no...?

-¡¿Pero qué te pasa, acaso eres tonto?! ¡Ya te he dicho que eso es sólo lo que piensas tú!

-Pero yo no me gusto a mí mismo...

-El que se odia a sí mismo, no puede gustar a los demás, ni tampoco confiar en nadie.

-Soy un cobarde, un miedoso, un indeciso, un débil.

-Pero si te comprendes a ti mismo, podrás tratarte mejor.

-Yo me odio a mí mismo. Pero creo... que podría gustarme a mí mismo.